En medio de la pandemia del coronavirus, el estado de Chile y el Gobierno de Sebastián Piñera no cesa la represión al pueblo mapuche. Ya van 54 días de huelga de hambre de los presos políticos mapuche, donde el gobierno solo a respondido con mayor militarización en la zona de Arauco y Malleco aprovechando el Estado de excepción.
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En plena pandemia, crisis social y económica el Estado en Chile arremete nuevamente y con mayor militarización para el Pueblo Mapuche, inclusive con la introducción de militares y policías en los territorios. La respuesta del Gobierno fue incrementar la militarización en la zona, recordemos que estos fueron quienes estaban “entrenados a matar” del comando Jungla, quienes asesinaron a Camilo Catrillanca el año 2018.
Reconociendo que hace muchos años en distintas partes de la región de La Araucanía y el Biobío se vienen dando procesos de recuperación territorial, la protección del agua, la tierra, la vida en contra también de los proyectos transnacionales y forestales que se encuentran a manos de grandes empresarios.
El Estado de Excepción vigente hasta septiembre “una estrategia para fortalecer la militarización en el Wallmapu”
La situación en las regiones de la Araucanía y el Biobío, vienen últimamente en el epicentro donde la represión no ha cesado en esta crisis sanitaria, más bien se intensifica, mientras simultáneamente la huelga de hambre de los presos políticos Mapuche lleva ya 53 días, donde ocho de ellos se encuentran presos en Angol: Sergio Levinao, Victor Llanquileo, Fredy Marileo, Juan Queipul, Juan Calbucoy, Danilo Nahuelpi, Reinaldo Penchulef, Anthu Llanca y también se encuentra el Machi Celestino Córdova en la Cárcel Temuco, quien ya venía de una larga huelga y su estado de salud es crítico, de igual manera todos los huelguistas se encuentran en pésimas condiciones de salud, considerando lo que conlleva esta situación en plena crisis sanitaria. Incluso uno de ellos, fue llevado al hospital de Imperial, situación que se seguirá agravando, dado la cantidad de días que se llevan y la nula respuesta que han recibido por parte de las autoridades gubernamentales.
Las demandas de la huelga es principalmente que el Estado chileno y el gobierno de turno respeten y generen una aplicación efectiva en cuanto al convenio 169 de la OIT. Debido a esta exigencia se han realizado diversas manifestaciones en solidaridad.
Piñera al igual que Margaret Thatcher
El Estado Chileno y los gobiernos de turnos, buscan confrontar esta situación mediante violencia de la condena de morir en la espera de respuestas, sin diálogos posibles, por lo que algunos medios han generado una relación comparativa con el “caso” de Margaret Thatcher, quien dejó morir a 10 huelguistas de hambre de Irlanda del norte en 1981.
La comparativa, si bien, se enmarca en contextos diferentes, en ambas situaciones, la huelga de hambre y la actitud inoperante de quienes están en el poder pueden llevar un desenlace fatal, como el de los huelguistas irlandeses.
Tras cinco años de protestas de los republicanos irlandeses que estaban encarcelados en Irlanda del Norte, donde se pedía un status especial para los prisioneros. En el año 1980, siete republicanos de HM Prison Maze fueron parte de primera huelga de hambre, la cual duró 53 días. Al próximo año, ya en marzo de 1981, se realizó la segunda huelga de hambre; quienes estaban en prisión comenzaron a sumarse de a poco a la huelga, la intención era que la mirada pública se posiciona sobre Thatcher, quien era primera ministra, quien se negaba a otorgar lo que solicitaban los huelguistas.
La huelga de hambre finalmente terminaron con 10 fallecidos en huelga de hambre, según el diario “El País”, publicado en 1981 daban cuenta que: “la razón inmediata: los familiares de los presos no querían dejar morir ya a sus hijos. La razón profunda: el gobierno británico no estaba dispuesto a ceder y el movimiento republicano consideraba ya inútil la pérdida de más vidas”. Mientras tanto, que Thatcher, insistía que no se le otorgaría ningún estatus político a pesar de todas las huelgas de hambre que puedan realizarse.
Al mismo estilo de Margaret Thatcher, nuevamente Piñera se enfrente a una huelga de hambre de los presos políticos mapuche, sumado también que actualmente existen 2000 presos políticos de la rebelión popular de Octubre de 2019. Inclusive en el año 2010 durante la huelga de hambre, el Gobierno de Piñera respondió con el Plan Araucanía, dando a conocer que “la violencia no conduce a nada”. Actualmente los presos políticos mapuche llevan 54 días en huelga de hambre y uno de ellos, el machi Celestino Córdova se encuentra grave por sus condiciones de salud, así también el día de hoy, sufrió una caída al interior de la cárcel, hace ya unas semanas se conocía el asesinato del werkén de Collipulli Alejandro Treuquil, y el constante desalojo que vienen sufriendo nuevamente las comunidades mapuche como en el lof Adkintue en el sector de Lonquimay.
Ante todo este escenario, la respuesta del gobierno ha sido de aumentar el contingente militar desde el Biobío hasta La Araucanía, en la zona de Arauco y Malleco. Todo esto también con apoyo de la multigremial, asociaciones empresariales y contratistas forestales.
Las movilizaciones en las calles y concentraciones vienen a poner en visibilización la situación del estado de la huelga y cuales son las demandas de los presos políticos. El día 23 de junio, se realizó una caravana de comunidades de Malleco a la ciudad de Temuco, llegando a la Intendencia Regional , encabezadas por sus autoridades para hacer entrega de una carta al presidente Sebastián Piñera, de la cual informa la crítica situación que hoy mantienen quienes se encuentran en huelga de hambre.
Esto no es nada nuevo, la militarización en la zona y los asesinatos al pueblo mapuche, de hecho durante los gobiernos de la ex concertación se asesinaron a más de una decena de comuneros mapuche entre ellos a Alex Lemún, Johnny Cariqueo, José Mendoza Collío, Matías Catrileo, José Huenante, quien hasta el día de hoy se desconoce su paradero.
Ministro Blumel y el Ministro Espina visitaron la zona de Arauco
La visita del Ministro del Interior y el Ministro de defensa esta semana, quienes se reunieron con empresarios de las grandes forestales, donde el Estado busca perpetuar y sostener la represión de las cuales las consecuencias solo han sido muertes, encarcelamiento, persecución y un sin fin de montajes.
La justificación de ministro de defensa de trasladar militares a las comunidades la “justificaba” por los atentados ocurridos estos últimos días y hace en capie del ataque en Arauco a una antena telefónica, de la cual la fiscalía confirmó irregularidades de parte de Carabineros de Chile.
En Chile, el Estado a perpetuado por siglos la opresión a un pueblo que se mantiene en resistencia, que todo lo vivido en la rebelión desde el 18 octubre demuestra que la línea del gobierno fue la represión, la que ha mantenido por año a las comunidades militarizadas.
Hoy, la estrategia que busca profundizar el gobierno es mediante “el miedo” bajo el control de su brazo armado, buscando solo salvaguardar sus intereses. A su vez, viene a dotar de mayores atribuciones a todas las fuerzas policiales criminales del país, mediante políticas represivas, utilizando recursos financieros que podrían ser usados de manera que se le pueda hacer frente a la crisis sanitaria, pero las prioridades para el gobierno en esta crisis ha sido de mayor endurecimiento a “mayores políticas de seguridad” con su lógica de supervigilancia.
Necesitamos Abolir la policía
Las fuerzas de seguridad no pueden ser reformadas para estar del lado de la clase obrera y oprimida. Por lo tanto, la única solución viable contra el terror policial es su abolición completa. Pero, para que haya una abolición, también debe haber una abolición de las cárceles, del ejército y el estado burgués y del capitalismo en su conjunto, porque son fuerzas absolutamente entrelazadas, nuestra lucha debe dirigirse hacia el sistema que se basa en esa represión y la mantiene.
Por el derecho a la autodeterminación del Pueblo Mapuche
Los pueblos originarios poseen un enorme potencial estratégico en alianza con la clase trabajadora, de la que forman parte en gran medida y con quienes comparten las penurias de una explotación a la vez que la lucha contra un estado que por definición oprime y explota a las grandes mayorías.
Es que se hace imperante hoy tomar toda reivindicación del Pueblo Mapuche, quienes hoy salimos por la rebelión de octubre en Chile, que pelee en conjunto por derecho a su autodeterminación.
¡Levantemos una campaña contra la represión y darle frente a este gobierno de Piñera!